MOMENTO 3: MINEROS EMPRESARIALES – EMPRESAS MINERAS DE PEQUEÑA, MEDIANA Y GRAN ESCALA
- Los principales riesgos identificados corresponden a las dificultades de apertura y mantenimiento de productos y servicios financieros, cierres repentinos de cuentas sin justificación y a la cultura de la gestión de efectivo en los territorios.
- Los entrevistados estiman que las razones de estos riesgos están asociadas al desconocimiento de la actividad minera y de su cadena de producción por parte del sistema financiero, la poca oferta financiera en el entorno de las operaciones, el poco desarrollo tecnológico de las entidades financieras, la informalidad de la cadena de valor (principalmente aguas abajo) y la falta de certidumbre jurídica para el sector minero. Estos riesgos son atendidos a través de estrategias de mitigación relacionadas con la actualización permanente de la información del proyecto, la diversificación del portafolio de financiación y la implementación de medidas como SAGRILAFT y debida diligencia.
- Pese a reportar información a entidades de control, mineras, ambientales y gremiales, se consideran como significativos los retos asociados al cumplimiento de la gestión de riesgos de lavado de activos y financiación del terrorismo, principalmente por la informalidad de los proveedores y la desconfianza en el sector.
- En su mayoría, la fuente de financiamiento de los proyectos mineros ha sido la inversión de capital y en pocos casos el crédito (nacional o extranjero). Los productos financieros más requeridos para el desarrollo de la actividad minera están asociados a la gestión del dinero (cuentas de ahorro y corrientes), por lo que se ha buscado diversificar el portafolio de productos financieros para minimizar los riesgos de cierre de cuentas y para facilitar la gestión administrativa de sus recursos.
- En su totalidad, la relación con entidades financieras está en cabeza del equipo directivo de la empresa.
- Existe un desconocimiento generalizado de la Ley de Bancarización Minera. Sin embargo, se considera un mecanismo necesario para mejorar el acceso y la confianza entre ambos sectores.
- Existe una brecha significativa de acceso al sistema financiero formal al comparar empresas de mediana-gran escala con empresas de pequeña escala. En muchos casos, los requisitos o capacidades desincentivan los procesos de formalización e inclusión bancaria.
Capacitación de los participantes
Con la información recolectada, y bajo el espectro de la Ley 2177 de 2021, se definieron 3 momentos de capacitación.
- Del sector financiero al minero empresarial, en donde se abordaron las implicaciones de la Ley 2177 y del SARLAFT 4.0.
- Del sector minero al sector financiero, en donde se hizo énfasis en la necesidad de un enfoque diferencial en los procesos de inclusión financiera.
- Del sector financiero al minero artesanal y de subsistencia, en donde se busca acompañar los procesos de inclusión financiera. Por riesgos externos en materia de seguridad, y ante las dificultades de conectividad de los territorios, este acompañamiento se encuentra pendiente.
Así mismo, el contenido de las capacitaciones se estructuró con lineamientos y buenas prácticas emitidos y sugeridos por ASOBANCARIA, la Superintendencia Financiera de Colombia, la Universidad Javeriana de Colombia, el Ministerio de Minas y Energía, y la Agencia Nacional de Minería. Adicionalmente, se incluyó el Código CRAFT y las recomendaciones generadas en el proyecto.